En la mañana de hoy he tenido el honor, suerte y gusto de
asistir al acto oficial de despedida de los profesionales que se jubilaron en
los años 2019 al 2022 en nuestro Distrito. La pandemia fue la causante de tanta
demora e imposibilidad de su realización.
Partiendo de mi agradecimiento al actual equipo directivo por
su amable invitación y a la Dra. Pulido (directora de mi Centro de Salud donde
tengo mi plaza en propiedad en el Servicio Andaluz de Salud) por facilitarme la
asistencia, quiero plasmar en estas sencillas palabras, todas las sensaciones
que en el acto y posteriormente, me han surgido.
Han sido más de 200 personas las que en esos años se han
jubilado, pero solo han podido asistir algo más de la mitad, por diversos
motivos.
Tal y como iban siendo nombradas, me surgían sensaciones,
sentimientos y no pocos chispazos. A muchos no llegué a conocerlos. A otros de
entrada no los recordaba, pero me sonaban sus nombres o rostros, pero ya luego
pude acordarme de ellos por activación de algún locus de memoria inactivo en
ese momento y luego se pudo activar.
En su inmensa mayoría, tenía gratos recuerdos. En muchos
solo recuerdos. En algunos recuerdos no tan gratos.
Era curioso ver muchas circunstancias que con muchos se
rodearon. Con algunos he mantenido incluso relaciones profesionales a
diferentes niveles, tanto ellos como yo. Algunos estuvieron por encima de mi en
la estructura jerárquica del SAS y luego cambiamos de niveles ambos. Algunos
han sido profesores y docentes míos, para luego ser yo docentes suyos.
De muchos he aprendido muchísimas cosas desde el punto de
vista humano, personal, familiar, y sobre todo profesional. Es más, hoy en día,
y tras muchos años, sigo haciendo cosas que ellos me enseñaron, y que recuerdo
cuando las tengo que hacer.
Con otros, he guardado sus formas de ser y actuar ante las vicisitudes
que el día a día profesional, personal o social nos depare. De otros aprendí lo
que no se debe hacer, de ser o de actuar. También los recuerdo.
En definitiva, un raudal de sensaciones, recuerdos e
impresiones gratas que me llevé en el zurrón a mi casa y que luego, en la
noche, antes de que el sueño me alcanzara, pude de nuevo saborear.
Grande mi Distrito Bahía de Cádiz La Janda, y más sus
gentes.
Dios os bendiga.
Nos hace falta a todos….
Jerez de la Frontera, 23 de junio de 2023.
Muy bien Manuel.Tus comentarios siempre son enriquecedores. Saludos
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