sábado, 10 de octubre de 2015

QUINTO CUMPLEAÑOS



Hoy es el quinto cumpleaños de este blog y por tanto, también mío. Fue todo un reto pendiente que tenía el crear uno, y como bien sabéis, el que viniera un niño a la consulta y dijera esa frase, fue el chupinazo que me hizo decidirme a su creación, pues ya tenía lema o título del mismo.
Siento no poder hacer una celebración por todo lo alto como este blog y los lectores os merecéis, pero ando en la recta final de mi tesis doctoral. Ello está consumiendo todos mis recursos, energías y tiempo, por lo que tengo al blog y a vosotros un poco en barbecho.
Prometo que tras la lectura de la Tesis, os dedicaré tiempo y energías compensatorias como suele suceder a todos los barbechos. Este descanso puede que de energías renovadas y sobre todo, nuevas ideas e inciativas.

Una promesa se debe cumplir. Si Dios lo quiere y un poco de vuestro aliento y comentarios me apoyan, a la vuelta de la esquina, nos reactivamos todos.

Saludos a millares para todos y gracias por estar ahí.

Manuel M. Ortega Marlasca

10/10/15