martes, 26 de febrero de 2013

CUANDO EMPIEZA “TU” CONSULTA






No es que me crea ya el abuelo cebolletas (bueno, un poco…vale….) pero ya a lo tonto… son ya para los 6 años que estoy en la consulta que ahora ocupo. No es la única, son varias pues son ya “itantos” años los que pasaron tras terminar la especialidad….ja ja ja….no doy datos, si bien muchos los podréis calcular sin problemas al ser casi de la misma quinta.
Todavía recuerdo las sabias palabras de mi primer tutor el Dr. Molina Deudero cuando me empezaba a guiar por la senda de la atención primaria. Siempre recalcaba que te podías sentir al frente de tu consulta tras cierto tiempo que transcurriera y que tus “parroquianos” confiaran en ti en tal grado que antes de iniciar un tratamiento ofertado por otro colega de otra especialidad, vinieran a consultártelo antes de comenzar el mismo y saber tu parecer al respecto. Insistía siempre en ese punto de “no-retorno” en el que los pacientes se afianzaban de tu mano y garantizaban el buen criterio de un colega con mi parecer.
No recuerdo muy bien cuanto tiempo pasaba desde que empecé esta consulta hasta ese punto en la que se podía decir “mi consulta” pues la vorágine del día a día y la gran diferencia entre los titulares de la misma con mi llegada, me impidió controlar el día en la que por primera vez un paciente llegaba con ese grado de confianza.
De lo que sí que recuerdo ha sido la última, en la que tras varios años he conseguido que un paciente dubitativo y receloso de inicio sobre mis formas de actuar desde el punto de vista profesional, ha visto como hasta este ilusionado médico de familia, puede incluso hasta llevar la razón en temas que se valoraban inicialmente como de especialistas del hospital. No ha sido fácil, y el que recientemente me viniera a hacerme la pregunta “¿me tomo esto que me han dicho en el hospital?”, me ha dado un buen espaldarazo en una de esas rachitas que parece que no todo debe de ir como debiera…
Gracias a todos aquellos parroquianos que me aprecian y saben darme de vez en cuando esos guiños de genialidad, gratitud y respeto que tanto se agradecen.


Jerez de la Frontera, a 26 de febrero de 2013.