lunes, 21 de mayo de 2018

CON MI BICHITO




Todos los días nos llevamos en la consulta cosas de lo más variopinta que se puede pensar. Cosas buenas, malas, regulares, curiosas, luctuosas, jocosas, asquerosas…
En esta ocasión mostramos una curiosa y para mí de alto impacto.
Es una paciente joven que ya conocía que portaba un marcapasos-desfibrilador desde hacía un largo tiempo por motivo de una arritmia detectada. Conocía de su implante y de buen control, pero no sabía lo del tatuaje y los motivos de ello.
Su argumentación era doble. Por un lado a modo de intentar integrarlo en su ser con un indicativo significativo como este tatuaje. Y en segunda motivación para hacerlo más tangible en caso que se deba de conocer de su existencia si algo le aconteciera y no estuviera consciente; algo que no sería ni descabellado pensar dada su enfermedad de base.
Me impactó y obtuve su autorización para la foto y salir en mi blog. Reitero mi agradecimiento por el permiso y la lección de vida que me dio y de la que sigo disfrutando ahora con todos vosotros.




Jerez de la Frontera, 21 de mayo de 2018.